top of page

Sábado 10 de junio de 2023

Joel Soler

Actualizado: 13 nov 2023


Capítulo 102

Tensión en el mercado


“De nuevo, el calendario y sus predicciones se ceban con mi templo de los sábados.

Un templo cada vez menos mágico y seguro.”



Aunque la predicción del día es mala, hay una cosa que me hace feliz: es la primera vez desde hace muchísimas semanas que el grupo está completo. Hemos venido todos, sin excepción.

Durante la primera hora, el ambiente es bastante bueno. Se puede palpar alguna aspereza, no es perfecto, pero este pequeño oasis en mi templo ya me ha dado las energías suficientes para seguir adelante.

Por desgracia, el primer elemento de tensión no tarda en presentarse.

Anna y Oliver están discutiendo. Lo hacen a cierta distancia del resto. Ver a estos dos discutir, con lo bien que se llevan siempre, es algo que sorprende e incomoda a todos los demás.

No consigo escuchar de qué hablan, pero creo que es el tema de Nora, como no podía ser de otra forma. Oliver le estará diciendo que no se meta y Anna insistirá como hizo conmigo ayer.

Por el tema que es, estoy pensando que tal vez yo debería intervenir. Ahora que lo pienso, Oliver sigue sin saber que Nora está viviendo en mi edificio, o eso creo. ¿Voy o no voy?

No me da tiempo a decidirme, porque antes de hacer nada, Lydia empieza a pegarme manotazos muy fuertes en el hombro. Pero muy, muy fuertes.

La miro y me hace señales con la cabeza para que mire a un punto en concreto. Lo que vemos es algo que ninguno de los dos se podía esperar lo más mínimo.

Estrella y Jordi paseando juntos por el mercado, como si nada.

Si soy sincero, no estoy del todo seguro de lo que implica esto, pero intuyo que debe de ser algo destructivo para Lydia. Jordi es su pareja, y uno de sus principales nexos de unión era el odio a Estrella, en teoría. ¿Qué hacen paseando juntos?

—Izan y yo nos vamos a un sitio un momento. No nos sigáis —dice Lydia mirando al resto. Luego me agarra de la muñeca y tira de mí para que sigamos a su pareja y a su expareja.

—¿Jordi no odiaba a Estrella? —pregunto con el clásico grito susurrado que reservo para comunicarme con Lydia en momentos de crisis.

—¡Pues claro que la odia! —grita ella, susurrando, pero no mucho—. Tenemos que mirar qué hacen. A lo mejor se han encontrado de casualidad, o a lo mejor Jordi quería hablar con ella para zanjar cosas.

—Y les estamos siguiendo porque no te fías de Jordi, ¿verdad? —le digo con toda la confianza, aunque le duela. Conoce mi opinión.

—No me fío de Estrella.

—¿Crees que está manipulando a tu novio? ¿Seguro que no es al revés?

—A ver, Izan. ¿Me apoyas o no?

—Sí, sí…

—Además, ¿tú no tenías un problema con Estrella también? No la vas a defender, ¿no?

—No, en principio no. Mejor me callo y te sigo.

—Eso, bien dicho.

Seguimos a la pareja incómoda un rato más. Jordi se muestra sonriente, y es Estrella la que está seria todo el rato. Con esa imagen, lo normal es pensar que, de haber un manipulador, ese es Jordi. Pero supongo que decirle eso a Lydia ya sería motivo de puñetazo en el estómago. No me la voy a jugar tanto.

Después de dos o tres minutos como espías desesperados, Estrella cruza su mirada con la nuestra. Lydia se hace la tonta y se intenta esconder, pero creo que ya no tiene ningún sentido.

Estrella habla con Jordi, nos señala, y los dos se acercan a nosotros.

Me quiero escapar, pero sería una imagen patética. Ya están aquí...

—¡Cuánto tiempo, Izan! ¿Hoy me sigues tú a mí? —me dice Jordi.

—Sí, bueno, es que me pareció tan gracioso cuando me lo hiciste tú a mí, que pensé en probar —le contesto.

—Lydia… —dice Estrella—. No hace falta que te escondas.

No sé si eso se puede considerar esconderse. Está camuflada entre dos expositores giratorios de gafas de sol, pulseras y cosas así, haciendo como que es una clienta que tiene que acercarse mucho a las cosas para verlas.

—Lydia… —dice Jordi—. Espero que no hayas pensado cosas raras al verme con Estrella.

—Bueno, tú dirás lo que crees que se puede pensar —contesta ella.

—Nos hemos encontrado por casualidad —dice Estrella.

—¿Te he preguntado? —le responde Lydia sin mirarla a la cara.

Estrella agacha un poco la cabeza y se aparta un poco.

—He venido al mercado para ver si te encontraba —dice Jordi—, porque sabía que hoy vendrías aquí, y quería darme una vuelta por mi cuenta y esperarte para acompañarte a casa cuando terminases.

—Y te has encontrado con esa —digo yo, ya que Lydia parece que no quiere hablar— y has pensado que es buena idea pasar un rato con ella en el mismo sitio donde sabes que Lydia está paseando, ¿verdad?

—Pero bueno, Izan… —dice Jordi—. ¿Tú también odias a Estrella? Qué eres, ¿el amigo que se cree a ciegas todo lo que le cuenta su amiga sobre sus ex? Oye, que no digo que Lydia tenga gran parte de razón, pero tú no estabas ahí, ¿no?

—No… —dice Estrella—. Izan me odia por motivos completamente ajenos a Lydia.

Jordi la mira, sorprendido. Luego me mira a mí, y yo asiento.

—Vaya, Estrellita… —dice Jordi, apartándose un poco de ella—. Tienes talento para ganarte enemigos.

Estrella solo agacha la cabeza. No contesta.

Lydia está haciéndole señales a Jordi para que hablen en privado.

—Izan, ¿podemos hablar? —me dice Estrella.

La miro en silencio. Veo que Lydia y Jordi se apartan para hablar a solas, así que… Bueno, no me queda más remedio. Pero no tengo ganas.

—Qué, ¿quieres hacer las paces? —le digo. Creo que mi tono es agresivo, más o menos.

—¿Alguno de los VDLS se han puesto en contacto contigo?

—Te lo juro, Estrella… Cada vez que pienso en ese tema, me pongo de una mala hostia…

—Hace poco hablamos de ti… —al decirme eso, mi interés se dispara—. Rojo sigue diciendo que prefiere mantener la distancia por el momento. Verde sigue diciendo que te conoce de oídas pero que no tiene nada que ver contigo. Pero los otros tres…

—¿Los otros tres? ¿Qué les pasa?

—Gris ha dicho que se está acercando un poco más a ti, aunque no ha definido si quiere revelar su identidad o no. Azul y Negro, por su parte… Bueno, por lo visto, se conocen, y están pensando en hablar contigo. Es posible que revelen su color dentro de poco.

¿Gris se está acercando a mí? ¿El solemne que hablaba del destino? ¿Y Azul y Negro quieren revelar su identidad? Espera… No me esperaba esto, para nada.

—¿Por qué me lo cuentas? ¿Vuestras reuniones no son privadas?

Estrella agacha de nuevo la cabeza.

—No lo sé. Pero pensé que te gustaría prepararte o tener esa información para que no se te escapen estas cosas en tu entorno.

La miro. Por un momento, veo a la Estrella de la que empecé a hacerme amigo. Creo que soy un blando. Con Nora me pasa lo mismo.

Sin decir nada más, Estrella da la vuelta y empieza a irse. Al mismo tiempo, veo que Lydia y Jordi ya han terminado su charla privada, y Jordi, al ver que Estrella se aleja, corre detrás de ella.

—Ahora la persigue… —dice Lydia—. Yo paso de él, de verdad.

—Bueno, mira, una buena noticia.

—Me dijo que la odiaba, pero creo que es todo lo contrario. Que haga lo que le salga de las pelotas. A mí me da igual. ¿Volvemos con esta gente?

Yo asiento en silencio y la acompaño desde detrás. Es mucha tensión como para gestionarla.

Los demás del mercado nos miran, confusos. Abril corre hacia mí, y Lydia nos deja solos y se lleva al resto con ella.

—¿Qué ha pasado? —dice Abril.

—Es tan complicado que no sabría qué decirte…

Recuerdo que a Abril le duele que nunca le cuente nada. ¿Pero cómo le cuento todo este contexto? En especial lo de Estrella y los VDLS…

Sin que me lo esperase, Abril me abraza.

—Si no quieres o no puedes hablar de ello, lo entiendo. Si alguna vez estás preparado para hacerlo, te escucharé. Si no, intentaré aliviar un poco tu carga por lo menos.

Me sorprende. Se supone que mi secretismo es lo que nos aleja, pero ahora está diciendo esto. Creo que no lo entiendo. A lo mejor es que proceso lento. Lo único que quiero por el momento es dejarme llevar y dejarme querer.

Sigue siendo mi templo, aunque vengan a romperlo. No será tan fácil de romper.







22 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

Epílogo y texto final

Epílogo: Más allá del calendario Este es el final de la historia. La historia que Izan ha vivido durante todo un año. La historia de doce...

Jueves 29 de febrero de 2024

Capítulo 366 Todos miramos a Oliver. Su frase se ha quedado a medias. —¿Oliver…? —pregunta Anna. —¿Qué? —pregunta él, con una expresión...

Miércoles 28 de febrero de 2024

Capítulo 365 A (Parte 1) CDLS al completo en el templo “Eso no ocurrirá. Y ya no importa de quién sea la otra letra. Acabaremos hoy, pase...

コメント


bottom of page