top of page

Martes 17 de octubre de 2023

Joel Soler

Actualizado: 18 oct 2023


Capítulo 231


Me apunto al gimnasio

“Pero es que es el gimnasio de Enzo. Hubiese tenido bastantes motivos para intentar ignorar el calendario y burlar a mi destino. Mira, no me escapo…

Porque no me escapo. Pero, si fuera por mí, me escapo.”



Creo que Enzo pensará que soy muy fan de sus brazos. Por ser mi primer día, por lo visto, Enzo (o alguno de los que trabajan aquí), se ofrecen a hacerte un tour por el lugar, te enseñan cómo van las máquinas, te dan información sobre las clases, consejos y demás. Así que aquí estoy, junto a Enzo y a Saúl, dando un paseo por el gimnasio al que me apunté ayer.

Miro los brazos de Enzo porque asumo que esos brazos, el martes que viene, me pegarán la paliza de mi vida. Unos brazos con un poder destructor que no me apetece comprobar, pero que se nota solo con verlos. No consigo entender por qué querría pegar a una persona así.

Hay otro motivo por el que lo miro bastante… Y es que me suena un poco. Creo que, ahora que lo veo más de cerca y sin Abril al lado, acabo de caer en que lo he visto en alguna otra parte. No consigo recordar dónde. A lo mejor me estoy confundiendo con otro, pero, cuanto más lo miro, más seguro estoy de que yo ya había visto a esta persona incluso antes de empezar a verla con Abril de paseo en los últimos meses.

Nos asomamos a cada una de las clases, y en la de spinning confirmo que la profesora es Abril. Mientras la veo dándolo todo, noto que me ve y que se sorprende. Se ha desconcentrado y me parece que ahora mismo lo está pasando mal por mi culpa. Cada vez estoy más seguro de que ha sido un error apuntarme aquí.

—Bueno, usted dirá, ¿qué le pareció nuestro gym? —sí, Enzo lo llama gym. Y nos habla de usted.

—Ah, pues bastante completo, sí —digo.

—Le veo muy mustio, jovencito. ¿No le vendría bien empezar con una clase de bailoteos? —dice mientras hace como un movimiento con la cadera que me ha dado mucho mal rollo.

—Empezaremos con máquinas tranquilas —dice Saúl.

—A usted le gusta mucho eso del tranquileo, ¿su amigo es igual o qué? —pregunta, examinándome de cerca.

—Bueno, un poco —dice Saúl—. Pero nos adaptaremos.

—Oye, ahora que le veo la cara, amigo —dice Enzo, ahora mirando muy de cerca a Saúl—. Usted se ve como más relajado, ¿no? Como que ha podido dormir por fin. Tiene menos ojeras y todo, mi rey.

¿Eso son menos ojeras? Mira que ya tiene un buen par de bolsas…

—Sí, a veces me pasa. Paso semanas sin dormir bien y, de repente, pillo una racha de tres o cuatro días durmiendo como es debido. Ya se me pasará.

—Tome la infusión que le recomendé, no se haga el tonto, reyesito.

—Perdón, me cuesta eso de las infusiones —Saúl se pone la mano en el pecho—. Prometo que lo probaré en cuanto vuelva a tener problemas de sueño.

—Eso quería escuchar. Venga, ahora a tonificar esos cuerpos, que hay mucho trabajo por delante. Se ven flojos pero encantadores.

—Me lo dicen… —digo, y Enzo se ríe a carcajadas. El martes que viene no se reirá tanto cuando le pegue. Bueno, supongo que no. A lo mejor se ríe de mí por intentarlo y por la paliza que me pegará. De hecho, sí que es muy posible que se ría. Joder…

Pues nada, así ha sido mi primer día de gimnasio. Abril sorprendida (para mal) al verme, Enzo dándome miedo y hablando de esa forma que me ha costado seguirle el ritmo, y Saúl y yo ahí, en las máquinas más sencillas y tranquilas, para ir empezando sin matarnos. Aunque se supone que Saúl ya llevaba un tiempo viniendo, pero parece que le sigue costando como el primer día. Sus conocimientos teóricos de las máquinas y su forma de usarlas tienen una brecha bastante notable. Supongo que es la constitución de cada uno… A lo mejor a mí me pasará lo mismo. A lo mejor no tenemos ni idea de entrenar en esta clase de sitios.

Aunque se supone que hemos hecho poca cosa, he terminado reventado. No sé cada cuánto vendré, pero, por lo visto en la siguiente predicción… Mañana estaré aquí otra vez. Puro masoquismo.







25 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

Epílogo y texto final

Epílogo: Más allá del calendario Este es el final de la historia. La historia que Izan ha vivido durante todo un año. La historia de doce...

Jueves 29 de febrero de 2024

Capítulo 366 Todos miramos a Oliver. Su frase se ha quedado a medias. —¿Oliver…? —pregunta Anna. —¿Qué? —pregunta él, con una expresión...

Miércoles 28 de febrero de 2024

Capítulo 365 A (Parte 1) CDLS al completo en el templo “Eso no ocurrirá. Y ya no importa de quién sea la otra letra. Acabaremos hoy, pase...

Comments


bottom of page